Casandra predijo
que los actores serían reyes
hace ya mucho tiempo.
Todos se rieron,
nadie la creyó,
era dificil hacer otra cosa, entonces...
Pero Casandra
predijo también que los pájaros
volverían a emigrar al desierto,
que la vida estallaría
que las gentes moririan
de placer discutiendo esas visiones
incomprensibles,
y Casandra
escuchó gritos de furia,
mientras corría con el pelo revuelto
y el bolso golpeándole la espalda.
Casandra sabía
de las mareas de hombres de lenguas arqueadas
que invadirían el territorio,
de los números recurrentes y repetitivos
de la caída de las altas casas
del movimiento de la tierra
bajo los pies,
¡pobre Casandra!
Tanto sabía, sin poder evitarlo,
tanto ocultaba.
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5 comentarios:
Una terrible maldición... Ciertas cosas es mejor no saberlas.
No se puede decir todo lo que se sabe. A veces, es mejor pasar como ignorante...porque, total, las cuatro cosas que creemos que sabemos, se quedan en el aire. Pobre Casandra.
Joder... me ha gustado el poema, pero luego el vídeo me ha dejado fatal: esa música de Mr. Cohen con Natural Born Killers me ha matado... ¿salía así en la película?
El loop más tenebroso: cómo afectan las profecías a lo profetizado. Casandra no aprendió lo que otros sí aprendieron: a fingirse loca.
Cohen y Casandra ¡menuda pareja para una tragedia existencialista1 ;)
Invita a algo a casandra de mi parte.
Salud!
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