Breve coloreado.

Con una patada blanca en la puerta destrozó, a la vez que la madera endeble, mis expectativas y la ilusión de que ese iba a ser un día tranquilo e incoloro.

-¡De aquí no te mueves, so puta!

Y de nuevo me encontré entre el puño y la pared, rodeada por el rojo del amanecer y de la sangre emborronándome la vista.

Si quería cambiar de color, tan sólo podía esperar a la venida del negro, de la noche y de la muerte. Pasivamente como siempre.

Pero aquel día no quise hacerlo.

-¡Muérete tú, so cabrón!
-¿Qué dices? ¡Espera que...


Blanco y azul era el aire desde la azotea, negro el círculo de su boca asombrada mientas caía. El rojo se desvaneció de golpe, con una sola patada.

El día se tornó tranquilo e incoloro.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

sorprendente historia en RGB... y sorprendente darme cuenta de que esos tipos son los únicos criminales por los que no consigo sentir pena...

Divagando dijo...

cómo puede cambiar el rojo... manda huevos!!

Anónimo dijo...

Olé sus huev... digo, ovarios. Creo que mientras lo leíamos, todos hemos empujado un poco a ese cabrón. Buen viaje, tío. A ti, Isabel, un día colorido y radiante.

Soy ficción dijo...

Me alegra, que quieres que te diga, me alegra mucho.

SuperWoman dijo...

Hay villanos de ficcion que te caen mal desde la primera palabra en que aparecen...
Un supersaludo

Isa Pe dijo...

Yvi: y este cayó en su propia trampa, quedó encerrado en la tonalidad que le correspondía.

Diva: el rojo es muy, muy poderoso. Pero todo puede cambiar, en un breve instante blanco.

David: Lo que se merecía, ni más ni menos. No he creído nunca en las teorías "compasivas": "seguro que a él también le hicieron daño". No. Sin piedad, lo siento. Gracias, espero que tu finde esté espectacularmente lleno de fuegos de artificio multicolores.

Nausicaa: pues sí, yo también.

Superwoman: Y con qué pocas palabras lo hemos odiado todos...las justas para ver lo que es, lo que supone, y el alivio de verlo desaparecer. Saludicos.