Casi romántico.

Si fueras azul, y no
rosa palo y bermellón, blanco, negro y amarillo,
combinarías mejor con las cortinas,
destacarían más los rodapiés.

Pero eres tan sólo tú, tan
imperfecto como adorable, te colgaría
como a un cuadro de la pared, a pesar de esas
manchas de carmín podrido, algas
resecas y vómito incontrolado.

Y si fueras otro, te cambiaría
por ti, no podría acostumbrarme
y perder de vista esa imperfección
tan familiar
que tanto y tan bien me fascina.


9 comentarios:

pav dijo...

Es una suerte que no exista la perfección porque se perdería el encanto, y lo más terrible de todo es que ¡pegaría con las cortinas!

Nutopia dijo...

OOOooooooooooohhhhhh.... me encanta esta canción!!!!

Anónimo dijo...

las personas son como los materiales, son sus defectos los que les hacen unicos... sabías que el color de las piedras preciosas se debe a sus imperfecciones?

Anónimo dijo...

¡Qué grande, Isabel! El día que una tía me escriba algo así me hago el trajo blanco con cola y todo, jaja. En serio: MUY BUENO.

Un besazo, que el poema bien lo merece.

Guille dijo...

Genial. Me ha encantado.

Isa Pe dijo...

Pav: ahi le has dado, sería la ruina de los Ikea, oye.

Nut: eso es porque tienes buen gusto, cosa que yo ya sospechaba.

Yvi: no, esto no lo sabía. Me ha encantado que me lo digas.

David: si lo haces, quiero fotos ;)

Seseum: gracias, estás en tu casa.

Divagando dijo...

Pero los rodapies a fin de cuentas no sirven de mucho si tienes perro que se rasca en las paredes. Menos mal que hoy en día las combinaciones son flexibles. (Por eso de las modas). uf. Los colores son importantes, ¿te das cuen??? juas.

Anónimo dijo...

Espero que nunca nadie me escriba algo así.
Pensaría que ha llegado mi hora.
Me has emocionado.

Isa Pe dijo...

Diva: dí que sí, que Ikea nos salvará al final a todas...y tener gato, ni te cuento (aunque los rodapiés disientan)


María: Ni a mí, no sabría que hacer con ello. Ni emocionarme, me temo...me asustaría y todo.